miércoles, 7 de marzo de 2012

Vía López-Orduña a Las Ánimas

   Habíamos quedado para el domingo sin rumbo fijo. Recojo a César y vamos a mirar un rincón donde se puede abrir una larga cresta. Pero no nos llena del todo y me acuerdo de una zona del Róque de Las Ánimas donde no hay vías abiertas y tengo vistas dos líneas para abrir. Decidimos ir a mirar. Cuando llegamos el día está un poco cubierto y el roque en perfectas condiciones. Preparamos el material en el coche y comenzamos a caminar. Bordeamos toda la base y nos situamos debajo del objetivo. Desde donde estamos vemos bien toda la linea que queremos escalar. Subimos hasta llegar a la base de la roca y nos preparamos para iniciar la escalada.


Vista desde el sendero

Llegando al inicio

Primeros pasos

   Comienzo el primer largo haciendo una diagonal por la placa blanca desde su borde derecho buscando una zona de líquenes negros, para superarla mas o menos a la mitad. Unos bloques que suenan un poco me obligan a subir hacia la derecha y monto la reunión en el límite de la placa blanca con una placa gris-marrón. En éste largo vemos 4 clavos de una vía antigua muy oxidados, los dos primeros por debajo del paso en la placa negra. Sólo uso 1 en el largo y otro lo utilizo para reforzar la reunión. 


Paso de los líquenes negros

Iniciando el segundo largo

Llegando a la R3

   Cuando César llega a la reunión, le paso el material y a seguir. Sube por lo más directo posible evitando algún bloque que suena pero que no llega a moverse, lo "típico" de este roque. Se dirige al grupo de 5-6 dragos que se encuentran a mitad de pared. Se queda unos metros por debajo y a la izquierda de ellos. Ya vemos el diedro que va a marcar la segunda parte de la escalada. El tercer largo es una tirada corta hacia la derecha a buscar el inicio de dicho diedro donde monto la reunión. Aprovechamos para beber y comer algo.


Inicio del diedro

Drago debajo de la R4

Subiendo hacia el techo


   César comienza con el cuarto largo y poco a poco va ganando metros . Cuando lleva unos 20 metros dejo de verlo porque la vía gira un poco a la derecha y el diedro se cierra. Al rato los dos tirones en la cuerda me indican que ya tiene montada la reunión. Comienzo a subir el largo, los primeros metros se aseguran bien por el diedro, pero luego hay una zona de casi diez metros en la que el diedro es ciego y no hay posibilidad de asegurar. César los subió por el lado de la izquierda y yo lo imito, lo único es que la zona tiene algo de tierra y plantas, pero subiendo despacio y esquivando dichas zonas, se sube bien. Antes de la reunión viene la zona más dura de la vía, porque el diedro ya no es tan abierto y es totalmente vertical. Toca usar bien los pies para no petarnos. 


Asegurando desde la R4

Excéntrico metido a muerte

En busca del sol

   La reunión está montada en una fisura debajo de un gran desplome. Le paso el material y comienza el último largo. Los dos primeros seguros son un cintajo a una piedra empotrada y  un excéntrico que quedó de libro. Ahora bien asegurado empieza a subir por el techito y con la soltura que le caracteriza lo supera sin problemas, disfrutando como un enano. Estamos en nuestra salsa y lo agradecemos. Es mi turno, la mochila molesta un poco en el paso, me la quito y la cuelgo del arnés. Ésto es otra cosa. Al poco me reúno con César al sol en la arista. Lo agradecemos porque el viento ha estado soplando y hemos pasado frió en las reuniones.



   

lunes, 5 de marzo de 2012

Un mes desconectado

   Hace algo más de un mes desde la última entrada con actividad, pero eso no significa que no haya hecho nada. Hay de todo un poco: pateos, descenso de barranco, y una nueva vía larga, y digo nueva no porque no la haya hecho antes, sino porque ayer César y yo abrimos una nueva vía en Las Ánimas. De momento les dejo el croquis creo que definitivo para que los amantes del roque vayan preparando los friends y buscando fecha en el calendario para repetirla.